Oaxaca preciosa Ciudad, pero su gente NO tiene espíritu de servicio. Nadie hace el mínimo esfuerzo por tratarte bien, NADIE, todos dan por hecho que volverás. Muy triste ver lleno de puestos ambulantes, cubren toda la belleza de la ciudad
Hotel Bien, punto, no sobresaliente, no amable su gente, el desayuno empieza muy muy muy muy tarde, y cierran temprano el restaurante y el bar NUNCA lo abren